Thursday, January 29, 2015

Mi Papá Decía...

..."Todo tiene modo y se hace suavecito" ... "No hay nada peor que un tonto con iniciativa" ... "No hay enano bueno (refiriéndose al cócker de mi mamá que salía a pelearse con el rotweiller de la cuadra, para bienestar económico del veterinario)" ... Pero de todos sus dichos, el que más problemas me causaba y lo sigue haciendo, es "Lo perfecto es enemigo de lo bueno."
Nunca lo he entendido. ¿No se supone que hay que hacer siempre las cosas lo mejor posible? ¿Que el ser humano está llamado a alcanzar la perfección?
Hay cosas que simplemente he dejado de hacer, porque no me salen bien. Bueno. Sí me salen bien, no me salen perfectas. ¿Para qué hacer algo si no se hace perfecto? Me molesta mucho que me corrijan, no por falta de humildad, sino por frustración.
Y así nos quedamos muchas veces, paralizados por el temor de que algo no nos salga perfecto, aunque lo hagamos bien. Lo jodido es que la perfección es una pared que se escala sin fin, porque nunca deja de crecer. Sencillamente siempre se pueden hacer mejor las cosas. La clave está en hacerlas e irlas mejorando.
Si sólo existieran las cosas con errores, no tendríamos ningún app. Los desarrolladores sacan un modelo que funciona y le arreglan los bichos en el camino, para eso están las actualizaciones. No podríamos estudiar, porque nunca lo aprenderíamos todo. Jamás hablaríamos otro idioma, aunque podamos comunicarnos. Yo jamás me hubiera metido a hacer karate hace menos de un año. Me sale torcido, me confundo entre derecha e izquierda, doy las vueltas para donde no son y los niños de 8 años tienen más coordinación que yo. Pero siempre quise hacerlo y, en vez de aplastarme con las otras mamás a esperar que los peques entrenen, allí me pueden ver, haciendo vueltegatos con pulgas que me llegan a la cintura. Haciendo payasitos. Haciendo ruedas. Haciendo katas cheretas. Haciendo el ridículo porque no me sale perfecto. Nunca me va a salir perfecto. Pero alguna vez me va a salir bien.
Para mientras, cada vez que el perro enano de mi suegra me muerde los zapatos cuando me mira y me ruptura el tímpano con sus dulces ladridos, me recuerdo de mi padre y concedo que no hay enano bueno.

1 comment:

  1. La perfección creó no existe, si las ganas que uno le echa a las cosas y hacerlas cada vez mejor, tratar de superarnos simpre creó ahí el punto de dicho

    ReplyDelete